Esta rama de la Odontología abarca el diagnóstico, tratamiento y prevención de las enfermedades de la pulpa de los dientes, los llamados nervios, tejido que se encuentra en el interior de los dientes y gracias al cual el diente se nutre y percibe los estímulos externos, y sus técnicas de curación.
La Endodoncia es el tratamiento de nervio o de conductos mediante el cual se elimina la pulpa afectada de un diente y se sella el conducto.
La Endodoncia está enfocada a la prevención, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades de la pulpa dental y de los tejidos circundantes afectados por la misma.
La pulpa dental es el tejido que se encuentra en el interior de los dientes, y está compuesto de nervios y vasos sanguíneos.
Como consecuencia de la acción de diferentes irritantes (Caries profunda, Enfermedad Periodontal, traumatismo, fracturas…) la pulpa dental se enferma (inflama) aún cuando se mantiene vital en el interior del diente. O se infecta , produciendo la conocida necrosis de la pulpa.
Esta situación, si no se soluciona, continuará su desarrollo hasta eventualmente comprometer todo el hueso alrededor del diente por una infección de los tejidos que rodean al diente, lo que puede acabar provocando la pérdida del mismo.
Además, si no se realiza una Endodoncia a tiempo, el nervio puede producir un dolor muy intenso al Paciente.
La forma de practicar la Endodoncia ha sufrido un cambio drástico en los últimos años debido al desarrollo de nuevos equipos (localizadores de ápice, ultrasonidos, irrigadores, RVG, mecanización…) e instrumental flexible y Endodoncia rotatoria. Todo ello dentro de estrictas normas de Esterilización y desinfección.
La técnica consiste en eliminar la pulpa, limpiar y preparar el interior del diente y, por último, sellar el espacio.
Nuestro Especialista lleva a cabo sus tratamientos con la última tecnología y la ayuda de la radiología de baja radiación. Todo ello con las técnicas más seguras, efectivas y duraderas.
Sellar los conductos dentales con máxima precisión ofrece un resultado a largo plazo que en Indenta logramos con el uso de un sistema de obturación termoplástica en tres dimensiones que mejora el recubrimiento de cualquier irregularidad anatómica, con una calidad de acabado muy superior a la obturación manual clásica.
Tras un tratamiento de Endodoncia, es posible que las piezas dentales pierdan parte de su estructura y se tengan que restaurar, y en algún caso, colocar una Corona.
En Indenta buscaremos el método de restauración menos invasivo pero a la vez duradero, para intentar conservar el diente natural del Paciente.
Una Endodoncia necesita tiempo para curarse por lo que el Paciente debe cumplir unas instrucciones tras la intervención:
- Intentar comer por el lado contrario a la Endodoncia los primeros días, para evitar que duela o se facture el diente.
- Puede haber dolor postoperatorio o sensibilidad que dure desde unas hora a días, y que se puede irradiar a otras áreas.
- La pieza endodonciada puede doler al tacto durante unos días, debido a la reacción de cicatrización de los tejidos de soporte dentario.
- Debe tomarse 1 analgésico que use habitualmente (Nolotil, Ibuprofeno, Gelocatil, etc.…), 1 hora antes de la extracción y 1 analgésico tras la extracción según le prescriba el Doctor.
- En caso de que existiera infección previa, puede desarrollar inflamación de los tejidos adyacentes al cliente (flemón), en ocasiones siendo necesaria la administración de un antibiótico, que se lo recetará el Doctor.
- Posteriormente a la endodoncia, es necesario reconstruir o empastar la corona del diente lo antes posible.
Así mismo, siempre se debe acudir a revisión a su dentista de forma periódica.
